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El padrón biométrico hace diferencia, pero no toda la diferencia, estimado amigo.
Gracias a la Asociación Boliviana de Ciencia Política y la Konrad Adenauer Stieftung pudimos almorzar ayer, en esos almuerzos - trabajo que mes a mes se volverán en una costumbre de dialogo entre especialistas. Allí, ,Jimena Costa dijo que no nos equivocáramos, que estábamos metidos en un falso debate, como los muchos de los que gusta promover el gobierno:
Este no es un problema entre Padrón biométrico o Padrón manual, el tema de fondo y de verdad es entre ELECCIONES LIMPIAS y transparentes, o elecciones amañanadas y fraudulentas.
Creo que vale la pena distribuir este mensaje, porque es verdad. Se pude hacer fraude con uno u otro padrones, se puede tener eleccio0nes limpias también con cualquiera. Lo importante es que, habiendo detectado las fallas y problemas que tiene el viejo padrón, donde un 30% de los datos están contaminados y lo hacen poco confiable, hay que tener un nuevo padrón, claro y limpio, pero no tiene que ser biométrico necesariamente, que sería mejor, desde luego.
Pero sería mejor con un gobierno democrático, claro y limpio, también. Con una autoridad mesiánica, abusiva, falta de ética y compromiso con el bien general, como la que tenemos, un padrón biométrico es hasta un peligro contra la ciudadanía. ¿Dónde irán esos datos? ¿Están seguros, no se utilizarán para otras cosas que no sea organizar el voto? ¿Es creíble la Corte Electoral actual para garantizar su confiabilidad, su privacidad y su manejo?
Lo que está claro, más allá de todo eso, es que quienes impulsan la agenda electoral desde el gobierno, no tienen interés en reconstruir un sistema democrático de partidos e instituciones políticas, por lo que poco les interesa, sino que la gente crea que esto es honesto y transparente. Por lo demás, los bolivianos nos podemos agarrar a golpes o a tiros defendiendo la libertad, la democracia y las elecciones limpias, que a ellos les importa poco.
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