Cynthia Perou G.
Estoy segura que, como muchos o todos ustedes, hemos quedado absolutamente pasmados y sorprendidos por las declaraciones del ahora proscrito Cnel. Cardona, quien remueve nuevamente el pestilente estiércol del caso "Terrorismo" y como resultado, lógicamente, el asunto apesta más.
Pero las denuncias de Cardona no terminan con el caso "Terrorismo", sino que además señalan, lo que todos sospechamos, pero no podemos confirmar, que la dirigencia masista se halla sumergida de cabeza en negocios vinculados al crimen organizado internacional. De hecho, según la prestigiosa revista de Sao Paulo VEJA, la organización criminal que administra el gobierno tiene un pomposo nombre: el Cartel de las Estrellas (¿?), que lo ha derivado, según la propia revista, de su homólogo venezolano, también en el gobierno de ese país, el Cartel de los Soles.
Desde el comienzo del régimen que nos somete, hemos escuchado "rumores" acerca de la estrecha y lógica vinculación cocalera a la mafia del narcotráfico y de los cargamentos de armas y dinero que llegaban a Bolivia en vuelos clandestinos provenientes de Venezuela, regresando congestionados de cocaína. Sin embargo, eran "rumores", hasta ahora. En efecto, la indicada publicación brasilera, indica de una manera muy clara, que se puede establecer la frecuencia de estos productivos vuelos con sólo consultar con los diversos sistemas de control aéreo en Brasil, ya que absolutamente todas las naves que han surcado los cielos colmadas de mercancías ilegales, han tenido que solicitar permiso para hacer uso del espacio aéreo brasilero.
Analicemos. Desde hace mucho tiempo, una infinidad de personas, de buena, mala y masista reputación, se han dado a la delicada y peligrosa tarea de exponer los macabros planes y montajes gubernamentales con el caso "Terrorismo" (en cualquiera de las versiones de la saga) señalando al unísono el fraude elaborado desde las esferas más altas del Palacio Quemado. Ahora aparece un Coronel de Ejército, con reconocida, amplia e impecable trayectoria y méritos, denunciando que las armas "incautadas" en el sangriento operativo del Hotel "Las Américas" en Santa Cruz, así como muchas de las que luego se "encontraron" en diversos lugares de esa ciudad, pertenecían al Ejército de Bolivia y fueron entregadas a personas "enviadas" por el Presidente Morales para ser "plantadas" como evidencia del separatismo terrorista que se gestaba en aquel entonces desde Santa Cruz.
Analicemos más. Un "instrumento" político nacido en las siniestras sombras de las federaciones de cocaleros del Chapare, aparece ahora, sorprendentemente, vinculado al crimen organizado y los cárteles internacionales de tráfico. Un súper ministro se encarga de organizar las fronteras del país para facilitar los negocios ilícitos y un narco gobierno construye un aeropuerto "internacional" en Chimoré para agilizar envíos y recepción de mercancías ilegales y ganancias ilícitas.
No estoy diciendo que lo que dice el Cnel. Cardona sea cierto o que la revista VEJA tenga razón en publicar internacionalmente semejante escándalo. La verdad, sin embargo, es que a mí personalmente, me cuesta muchísimo más trabajo creerle a este gobierno.
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