miércoles, 24 de junio de 2009

Ser opositor

Fabian Restivo
unfotografo@hotmail.com

Es magnifico ser opositor. En cualquier país del mundo lo es, y en Bolivia mucho mas. Porque en Bolivia no hay que hacer nada, solo hablar. Es como una santificación del nuevo orden del caos. La piedra filosofal es una nimiedad al lado de la posibilidad de ser opositor en Bolivia.

Los medios de propaganda opositores (los que alguna vez fueron de comunicación), se dedican a mostrar predicciones electorales, que ellos insisten en llamar "encuestas". Tienen algunos empecinamientos, vicios de comportamiento que intentan denodadamente mantener. Uno de estos vicios es, justamente, hacer predicciones electorales y llamar a los "analistas políticos" a comentar la clarividencia como si fuera un hecho histórico, o sea, como si ya hubiera sucedido. Y se sienten tan felices que da pena intentar contarles la verdad. Sonríen y festejan. Entre ellos, claro. Pero para cuando falle (claro que lo saben), se apresuran a decir que si no sale el numero que ellos adivinaron y al que le pusieron tanto entusiasmo, es por el fraude. Lógico, si ya había sucedido en el estudio del canal y en la redacción del diario…si no sucede en la realidad, es porque alguien hizo trampa. Cualquiera se da cuenta de eso. Sin contar la caterva de nuevos escribidores, que aunque tengan una sintaxis intransitable y escriban con mas errores que Sor Sabina antes de salir del "yo si puedo", mientras tengan algo que decir contra el gobierno, los titulan de "analista político".

Ahora, si eso esta bueno, imaginemos como es ser opositor desde el gobierno. Mejor que eso, dos veces eso.

El gobierno departamental, el de Santa Cruz, por ejemplo, tampoco necesita gobernar, porque es opositor. Y allí es donde realmente se hace la maravilla. Otro que se encontró "El Dorado". El gobierno departamental no necesita (igual no podría) mostrar inteligencia de gestión. Le alcanza con sentarse en su gubernamental silla de opositor y oponerse. Y llevar a toda su gente a oponerse, de la mano del león que ruje, un poco deslucido, como despeinado, pero bueno…para eso están los medios de propaganda, para amalgamar a la gente con su gobierno-opositor y apoyar el proceso del camino hacia la victoria que nos devolverá la gloria que teníamos y que perdimos, para volver a ser la pujante Santa Cruz que los genios de la oposición (cuando eran gobierno, como ahora, pero no se oponían) no consiguieron en 400 años, ni acabar de asfaltar, ni de poner cosas tan básicas como desagües, ni con la España grandiosa, ni con todos los cruceños que pasaron por la presidencia de la república y por los ministerios, que hace unos años decían " tenemos los problemas de las grandes metrópolis" y ahora dicen que Santa Cruz creció tanto que es incontrolable. Obviando a conciencia que la ciudad de Santa Cruz es del tamaño de un barrio periférico de cualquier ciudad del mundo, con la variante de que en esas ciudades, durante la noche no encuentras caballos sueltos en las avenidas revolviendo la basura, ni la gente deja los autos arriba de la vereda. A cambio, uno de los pocos tipos que hizo algo tan útil como el único puente para cruzar de forma decente el rio Piraí, termino pegándose un tiro, porque sus cruceñazos amigos (según cuentan) lo abandonaron y presionaron llevándolo a la quiebra. Cosa solo comparable con mandar a la gente a la batalla al grito de "hagamos historia" y abandonarla entre el humo sacando pasajes a Miami al oír el primer espantasuegras.

Pero se oponen. Así de barato. Desde el encanto del fervor empecinadamente inútil, exhalando una inocencia alquilada en sus redes fabulosas de propaganda, que también se revisten de opositores perseguidos mientras persiguen a medio mundo y se utilizan a si mismos para declarar insultos y mentiras, dejando en claro que no hay libertad de prensa.

Son insospechados. No tienen pasado. Nunca estuvieron antes. Nacieron de un repollo que creció de la semilla que papá le puso a mamá, que es donde los dejo la cigüeña que los trajo de Paris, una hora después de las ultimas elecciones presidenciales, y al tiempo de abrir los ojos y lanzar el primer berrido, decidieron que las libertades y la democracia y el trabajo digno (no aclaran digno de que) están en peligro. Y como no vienen de ningún lado, los virginales tampoco se sienten en la obligación de decir a donde van. Solo muestran sus enlatadas medallas morales, su progresismo pro-dignidad (así, sin rubor), su iniciativa veloz hacia el "cambio si pero no así". Y de nuevo no aclaran cambio como. Solo sueltan la hojarasca verborrágica con cara de idea innovadora, cuando lo que pudieron hacer, mientras alguien se los decía, fue robarse algunos símbolos de la izquierda y de golpe proclamarse trasgresores, revolucionarios, combativos.

Predican la vuelta al suicidio como si hablaran de la resurrección. Claro que se puede ser compresivo y caer en la cuenta de que dieron tantas vueltas que están un poco confundidos. Pero igual crearon y crean listas de gentes a perseguir y a abusar, mientras se declaran perseguidos y abusados.

Los asesores de los opositores gobernantes, les crearon la tablita de respuestas, pero como se fueron rápido no les dejaron las instrucciones de cuando dejar de usarlas. Entonces de golpe se quedaron sin saber que decir, pero como son opositores recurren igual a la tablita que tiene básicamente tres puntos fundamentales: "están en campaña" "es puro populismo" "culpa de Chávez". Y siguen festejando.

El espectáculo del festejo es, lógicamente, solo para los públicos cautivos que tienen a través de sus redes de televisión, cuando en la realidad se preguntan "y ahora como seguimos?", mientras van a corte comercial, y aprovechan ese tiempo para ver como sus empresas se promocionan ante el mismo publico, o sea, igual siguen facturando. El famoso "circulo virtuoso de la democracia".

De verdad ser opositor en Bolivia es algo solo comparable con Disney en castellano. No encontrarías ni buscando con lupa una forma más cómoda de ser oficialista. Perdón, opositor. Porque si yo no entendí mal, todos los opositores están en el gobierno. O no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario