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Quienes fueron nuevamente designados para gobernar - en Bolivia, no lo olvidemos - se apropian de ese mandato y lo transforman en un atributo natural de carácter "providencial", contrapuesto a la racionalidad legal del mandato democrático representativo. Y no dejan de proclamar que ellos son progenitores de la verdadera democracia. Falso!, la están liquidando.
El subproducto de lo antes comentado no puede ser más perturbador de la idea democrática y de su especificidad histórica. Lo cual dificulta, como podrán apreciarlo, un juicio coherente y objetivo acerca de la democracia boliviana durante esta primera década del siglo XXI. En nuestro país, cabe afirmarlo sin ambages, E. Morales asume y ejerce sus poderes totales al mejor estilo de la dictadura comunista cubana, con espíritu de permanencia, pero refrendado con los oleos y sacramentos de la democracia occidental y los toques que aprendió de Luis Arce, quien sin pena sentenciaba: "vamos a ser taxativos(...) aquellos tontos útiles y quienes no estén de acuerdo, deben andar con su testamento bajo el brazo" Moralitos tiene los mismísimos modos.
He aquí pues, la diferencia entre el fenómeno de Fujimori, un demócrata liberal a quien lo toca la vanidad del poder y el caso de Mel Zelaya, frustrado discípulo de esa experiencia morganática que hoy titulan Socialismo del Siglo XXI.
Aún más, a propósito del desmantelamiento en curso de la institucionalidad boliviana en el ejercicio del poder, no hay separación de poderes, respeto al pluralismo, mucho menos garantía de los derechos humanos, de libertad de expresión y de prensa.
El Secretario de la OEA, José Miguel Insulza, prefiere argüir encontrarse inhabilitado para la aplicación de la Carta por respeto al principio de No intervención en los asuntos internos. De donde, el artículo 1 de la Carta, que consagra a la democracia como derecho de los pueblos "que han de garantizarla sus gobiernos", es objeto ahora de una particular reinterpretación: La democracia es un derecho de los gobernantes que ha de ser respetado por los pueblos y sus instituciones. Así de claro.
El gobierno de Morales se inicia en el 2005, reconociendo públicamente la legitimidad de la violencia. Razón ésta para el incremento de los delitos contra las personas y la propiedad arguyendo las necesidades de los movimientos sociales y económicas de los "delincuentes" (justicia comunitaria le dice). Luego otorga su reconocimiento a "éstos" los narco-movimientos-sociales, con base en el Chapare. Y, sucesivamente, arguye que su revolución es pacífica pero armada. Poncho rojo y fusil debajo.
Entre tanto, por efecto de la modulación social que ejerce su discurso político, refiriéndose a la libertad de expresión del mandatario, la violencia criminal aumenta en espiral. En el curso de un quinquenio, la cifra anual de homicidios ocurridos el 2004 se eleva, se triplica al 2009. Muchos, muchísimos bolivianos no acceden a una vida digna a manos de la revolución del cambio porque pierden su vida biológica, en una espiral que el mismo artesano de nuestra violencia califica de "transición". Y no bastándole ello, señala que "la delincuencia es inducida para golpear a la rueda del cambio". La violencia al 2010, es permitir que niños de 8 a 10 años estén buscando comida en los basureros a tres cuadras del palacio de gobierno en La Paz, cuando el sin par A García, muestra cifras de reservas en el Banco Central de miles de millones de dólares.
La democracia, según la Carta magna , la nueva digo, implica, el acceso al poder y su ejercicio con sujeción al Estado de Derecho. Pero, el otra vez inquilino de palacio, está totalmente borracho de poder. Gritó en ANAPOL: "Reyes Villa irá preso por corrupto", y luego lueguito dos miembros de la mismita ANAPOL son echados de la institución por dejarlo escapar, por donde "la chola nogales, el más criminal" fugó hacen muchos años, por la ruta oficial de la fuga, tontos somos? . Voló el capitán, a quien Cochabamba, acusa de robarle mucho, mucho dinero, ésta Cochabamba hoy en manos de Masistas, quienes se transportan muy cómodos en los sobrepreciados vehículos que se compró el ex prefecto hoy clandestino, solo falta que sentencien: su cárcel será Miami...
Pero sigo, una vez redactada la nueva Constitución, dicha Asamblea, desbordando el mandato que se le otorga, se declara en posesión de la soberanía popular originaria y destituye la totalidad de los poderes públicos constituidos e incluso electos y liquida los balances y contrapesos inherentes a la democracia tales como -elecciones, libres y justas, basadas en el sufragio universal y secreto como expresión de la soberanía del pueblo- lo que no es ni parecido, por que una vez ubicado el disidente, asi fuera un arcangel, es ladrón, k´ara, bandolero, gitano, perro, hippie, etc. Así que elecciones libres y justas no hay.
El reelecto gobierno del cambio, tiene fecha de vencimiento, y creo que ya está vencida. Belaunde el ex presidente peruano, dijo al Dr. Siles, "este pueblo valeroso, que hoy te eleva a presidente, puede también pedirte cuentas de tus actos y si éstos (tus actos) no son nobles, puede también destruirte".
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