Guillermo Capobianco Ribera
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Pareciera que por los mega intereses económicos y geopolíticos en juego, la suerte de la carretera Chimoré- San Ignacio de Moxos está echada.
Se construirá de todas maneras y por los trazos establecidos originalmente.
No es que la marcha de los indígenas de las comunidades de tierras bajas carezca de legitimidad; la tiene avalada por instituciones nacionales e internacionales por estar en consonancia con la doctrina de la defensa del medio ambiente y la biodiversidad.
Lo que acontece es que el segundo tramo de la estratégica vía es un imperativo para los centros del poder continental y mundial expresado ahora con brutalidad por la emergente economía de Brasil y del bloque mundial llamado BRIC que integran, además de la potencia del este, economías poderosas como las de China, India, Rusia y Sudáfrica.
Se trata de la ejecución apresurada del corredor noreste que tiene como objetivo vincular la red vial fundamental con Trinidad y luego con San Ramón y San Joaquín para desembocar hasta Puerto Ustarez en el Rio Itenez que demarca la frontera con la hermana República Federativa de Brasil.
Al otro lado del Itenez está el Estado de Rondonia región emergente del Brasil que por su crecimiento espectacular de los últimos años requiere transportar su agro-producción por los Puertos del Pacifico sin tener que dar la vuelta al Continente y hacerlo desde el Puerto de Santos en el Atlántico para llegar al Canal de Panamá o bajar hasta el estrecho de Magallanes.
Se dice con razón que cada proceso histórico en este país ha construido su infraestrutura de integración y de producción; la Revolución Nacional de mitad del siglo pasado completó la construcción de la vía troncal La Paz-Oruro-Cochabamba-Santa Cruz.
Ha sido hasta ahora "la columna vertebral" del estado Nacional.
El actual "Proceso de Cambio" quiere construir una carretera que sea columna vertebral del corredor nor-este con Brasil y de paso beneficiar a los Departamentos Beni y Pando como vía alternativa y menores costos que los que tiene ahora con la utilización de la estratégica carretera San Ramón Trinidad.
Bolivia está viviendo la hora de instalación de los corredores de integración y de exportaciones en función de las economías del entorno geopolítico conformado además de Brasil por Paraguay, Chile, Perú y Argentina.
Desde este punto vista el segundo tramo en cuestión está en el centro territorial de este complejo sistema geopolítico que está en pleno curso y que el TIPNIS pareciera que no tiene la fuerza para detener.
Estudios y gobernantes definieron a Bolivia como "tierra de contactos", otros entre los que se cuenta esta columna, como "síntesis geopolítica y democrática"
Para cumplir esta función histórica, emprendedores jóvenes como el Lic. Percy Añez Rivero vinculado a la agro producción, al sistema financiero nacional y a la ganadería, afirman que Bolivia debe dejar de ser "el país tranca" que es ahora "que en definitiva es una "tranca mental" que pone obstáculos al desarrollo nacional y ser de verdad un territorio de eficiencia en los servicios estratégicos y de buen trato a los beneficiarios directos de los corredores inteoceanicos.
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