LA CORRUPCIÓN EN EL SERVICIO EXTERIOR

Maria Quiroga
mariaquirogavargas31@yahoo.com

La Cancillería ya no pudo tapar el tráfico de automóviles con placa diplomática a que se dedicaba el embajador boliviano Jaime Ashimine Oshiro y se vió obligada a destituirlo, aunque le concedió hasta el 30 de abril 2009, seguramente para que termine de cobrar los dineros mal habidos en su gestión. Este señor, según dicen, ajeno al MAS, compró el puesto de embajador, con aportes de sus parientes de la colonia cruceña de Okinawa, en el periodo inicial de este gobierno, cuando se rifaba al mejor postor, los famosos avales.

El delito se conoció gracias a la denuncia formulada por los residentes bolivianos en el Japón.

Pero como éste, hay decenas de ejemplos de compra-venta de puestos diplomáticos de alto y bajo rango. Entre estos últimos, está el curioso caso de boliviano-francés llamado CARLOS TERRAZAS ORELLANA quien, fotógrafo de oficio, figura como "secretaria" (así en femenino) en la planilla de la Delegación de Bolivia ante la Unesco, en Paris. Este impostor cobra cada mes 2.614.44 dólares, solo por tomar fotos a los figurones de esa misión. En el Ministerio de Relaciones Exteriores se sabe que no cumplió siquiera con la presentación de "Declaración de Bienes" ante la Contraloría. Ante la denuncia de la Asociación de Residentes Bolivianos WAYRA, me permití dirigir e mails al mismisimo Señor Presidente de la República, denunciando el caso. Estos mensajes fueron interceptados en las embajadas de Paris y de Moscú, durante su visita presidencial a esas capitales.La copia la tiene la hoy ministra Nardy Suxo, que tambien debera investigar esta violación de correspondencia dirigida al Primer Mandatario. Pero la pregunta fundamental es a quien compró ese cargo?

Es preciso investigar ese nombramiento desde su gestación para llegar del hilo al ovillo de la corrupción en la Cancillería.

Interpelado por un residente boliviano en Paris, TERRAZAS ORELLANA, dicen que tuvo la desfachatez de decir, "si quieren que renuncie, que me devuelvan lo que he invertido" Y, claro, como seguramente la corrupta autoridad que le vendió el cargo, no desea desmonetizarse, su permanencia en el mismo, esta asegurada y las denuncias se las entrepapela.

Como ocurrió en el Japón, en YPFB, en ABC y en Aduanas, mas temprano que tarde estallará la revelación de ese escandaloso sistema de compra-venta de cargos. En efecto cualquiera que revise la nómina actual descubrirá gentes que jamás sospecharon convertirse en diplomáticos instantáneos. Es por ello, que aprovechan el tiempo traficando en liberaciones de automóviles, licores, línea blanca y hasta en cupones de gasolina subvencionada para diplomáticos (como es otra denuncia contra TERRAZAS ORELLANA).