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El discurso de Evo Morales el 16 de julio es verdaderamente un insulto a La Paz, más allá de que el presidente no nos guste o que queremos que se vaya, este hecho realmente pasa lo tolerable, ya que revisadas sus palabras en ningún momento hace énfasis en lo que históricamente significa los 200 año de libertad para los latinoamericanos y solo se limitó a insultar como siempre a los EEUU, la Iglesia Católica y a todos los que se le ocurre.
Y es que realmente da vergüenza el grado de irresponsabilidad (y hay que decirlo) de hipocresía y de ignorancia que tiene este discurso, afirmar que primero se los quiere dominar con la Ley, luego adormecerlos con la oración hasta llegar a las armas del golpe, es seriamente hablando una rodaja de estupideces que a veces nadie incluso los opositores no lo dicen con nombre y apellido, es una verdadera estupidez vergonzosa.
Habría que informarle a Evo Morales, que si pues, todos nos sometemos y nos someten al imperio de la Ley en todo el mundo la ley tiene mecanismos incluso coercitivos para que se cumpla y esto si bien es un medio de dominación es el que garantiza que vivamos respetando los derechos ajenos.
Lo de la oración es majadero ya que nosotros como cristianos católicos tenemos nuestras formas de creer en Dios y nadie se siente adormecido ni menos utilizado, ya que encontramos mayor tranquilidad y resignación en una oración que odio y sed de venganza.
Y lo de los militares que se lo pregunte a su jefe máximo Hugo Chávez quien de forma airada declaraba a los medios, que el "gorilismo" de honduras no pasará cuando el es el mayor gorila de la región no solo por sus rasgos sino por su origen militar.
Por eso creo que hablar de todo menos del Bicentenario y de sus consecuencias históricas es una afrenta a La Paz, y solo los aplaudidores de siempre los adulones lo abrazan a Evo Morales como gran orador.
Es hora de llamar a las cosas como son, y no de "camuflar" las palabras que aunque se las diga con mayor candidez significan lo mismo, la ignorancia es torpe dicen y este es el más claro ejemplo.
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